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El diseñador presenta “Historias hechas a mano”, un proyecto en alianza con la Corporación Mundial de la Mujer que reúne el saber hacer de comunidades artesanales con el suprareciclaje, la mejor forma de hacer moda consciente.

Por Natalia Díaz

Trabajar con artesanos, aprender de ellos, resaltar el valor de sus creaciones, apreciar su tradición, mostrar su maestría… Juan Pablo Socarrás lleva años comprometido con estas historias hechas a mano:  quiere contarlas, a veces con palabras, a veces con diseños. Y ahora también busca crear con ellos una colección de moda consciente.

“Es lo que quiero seguir haciendo, es mi propósito de vida”, dice el diseñador y lo hace al presentar Historias hechas a mano, un proyecto que tiene como objetivo visibilizar el trabajo artesano de las comunidades, esta vez con un ingrediente adicional: impulsando el tránsito hacia la sostenibilidad en el ecosistema moda, porque esta iniciativa desarrolla productos de diseño creados a partir de residuos y procesos de suprareciclaje.

Moda responsable y consciente

Con este proyecto, una alianza entre Socarrás y la Corporación Mundial de la Mujer, las dos marcas se han propuesto presentar una visión de moda responsable en donde convergen las tres dimensiones de la sostenibilidad empresarial: lo económico, lo social y lo ambiental. Sin restar importancia a la dimensión cultural, se quiere enfatizar en su importancia y su impacto en el ecosistema y las comunidades.

Historias hechas a mano se compone de una colección en la que han participado un total de 60 mujeres pertenecientes a distintas comunidades y colectivos que a lo largo de seis meses han recibido un acompañamiento y formación de parte de Juan Pablo Socarrás y la Corporación Mundial de la Mujer Colombia, en temas como asesoramiento empresarial, comercial y financiero que complementa la implementación de procesos artesanales a través del aprovechamiento de materiales de desecho o residuos, para fabricar productos con un valor ecológico “suprareciclaje”.

Ángela María Zuluaga, Vicepresidente de Asuntos Públicos, Comunicaciones y Sostenibilidad The Coca Cola Company LATAM y Juan Pablo Socarrás en la planta donde arranca el proceso de reciclaje de los envases.

Reutilización creativa

Esta tendencia, conocida también como upcycling es un ejercicio de “reutilización creativa” de los productos reciclables, con el fin de transformarlos o modificarlos para así convertirlos en otros productos de valor, ayudando a disminuir la necesidad del consumo de productos u objetos nuevos, al tiempo de reducir la adquisición de nuevas materias primas.

La iniciativa va de la mano con una visión ética de la moda que busca crear y fortalecer las iniciativas sociales en economías emergentes, conectando marcas y procesos de desarrollo con talentosos diseñadores, artesanos y micro productores locales.

“SOCARRAS, es una marca de diseño de autor, comprometida con aportar a la gran conversación que implica consolidar una propuesta de sostenibilidad, basada en la responsabilidad, la cooperación y la generación de oportunidades”, comenta Juan Pablo.

Un mundo sin residuos, un mundo más consciente

Historias hechas a mano cuenta también con el apoyo de Coca-Cola, que, enmarcada en su visión global de Un mundo sin residuos, busca aportar a la promoción del reciclaje y la reutilización a través del trabajo en conjunto con comunidades y demás actores sociales y del sector privado, impulsando buenas prácticas que ayuden a la reducción del impacto ambiental y al crecimiento de la economía circular.

Así, el empoderamiento y el desarrollo de capacidades de estas mujeres, a partir de la puesta en marcha del proyecto, se convierte en una pieza clave para la compañía para fomentar nuevas alternativas de sostenibilidad y visibilidad a través de proyectos de moda consciente como este.

 “Siempre he estado convencido de que la artesanía cobrará aún más impulso en el mundo de la moda cuando sea vista como un insumo, este permite cruzar las técnicas rigurosas y milenarias de Europa con maneras de entender la ropa y los tejidos tan particulares como las que se construyen en nuestras comunidades artesanales”, comenta el diseñador.

La idea es que las comunidades artesanales incorporen en su quehacer creativo estas nuevas fibras y conceptos de reciclaje para dar valor agregado a sus prendas, objetos y accesorios de acuerdo a los tiempos actuales que exigen tanto de productores como de consumidores  ser conscientes de la importancia de cuidar el planeta.

La colección contará con prendas de vestir, accesorios y línea de hogar. Para la elaboración de las piezas se invoclucran más de 15 técnicas artesanales y una gran variedad de materiales.

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