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A sus 102 años murió esta mujer dueña de un estilo único, arriesgado y lleno de originales ideas que influenciaron a miles de mujeres de todo el mundo. Según sus propias palabras: “la moda no tiene edad, se trata de actitud, sentido del humor y una confianza en uno mismo”.

Por Pilar Luna.

Iris Apfel se convirtió en icono de estilo a sus 84 años cuando la llamaron para ser la cara de MAC y de esta manera ser la mujer de mayor edad en aparecer en una campaña de cosméticos.

Nacida el 29 de agosto de 1921 en Nueva York, Apfel fue una verdadera influenciadora de moda gracias a un estilo un poco extravagante y muy osado, pero sobretodo, a que entendía la moda como una manera de expresión muy personal.

La influenciadora neoyorkina siempre usó la moda como quiso.

A Iris Apfel no le importaba arriesgarse, usar mucho color, llevar miles de accesorios en un solo look y jugar con la mezcla de texturas y prendas. ¡Y lo hacía de maravilla! “La moda es la más poderosa forma de expresión artística y puedes usarla para contar una historia sobre quién eres”, decía.

“No tengas miedo de mezclar estampados y colores, la moda es arte y debe ser expresada sin límites”, remataba diciendo con toda la originalidad que siempre la caracterizó tanto en sus vestimentas, como en su forma de ser.

Más es más…

Contrario a lo que se puede sugerir siempre sobre lo que debe ser la elegancia, Iris Apfel tenía como mantra: “más es más y lo demás es aburrimiento”. Era su forma de entender el estilo, de jugar con sus looks y de divertirse con la moda. El minimalismo definitivamente no era lo suyo.

Apfel fue la cara de MAC al os 84 años.

Esta neoyorkina, que era especialista en diseño de interiores, usaba su conocimiento en las telas y la mezcla de colores para crear sus propios atuendos y decirles a las mujeres que la seguían que usaran lo que quisieran, sin dudas, sin complejos, sin miedos. “Ser diferente no es algo que debas ocultar, sino algo que debes abrazar y celebrar”.

Reconocida por las enormes gafas que usaba siempre y la cantidad de collares que se ponía, Iris Apfel hizo colaboraciones con varias marcas, tuvo su propia muñeca Barbie y se apuntó, ya con varios años encima, a estar en redes sociales, en las que llegó a tener más de tres millones de seguidores.

Definitivamente lo de Iris Apfel no era propiamente el minimalismo.

Hoy su legado está más vivo que nunca, porque gracias a esta personalidad y a que se expresaba siempre como quería, Iris Apfel no morirá para sus seguidoras y desde donde esté seguirá influenciando a quienes, como ella, se atrevieron a ser. “La única regla de la moda es sentirte bien contigo mismo, el resto es solo ruido”, otra de las frases que nos quedan de esta increíble mujer.

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