En la puesta en escena de la Facultad de Diseño de Vestuario de la Universidad Pontificia Bolivariana, un grupo de estudiantes de últimos semestres con proyectos de emprendimiento o marcas ya establecidas dieron a conocer sus particulares miradas de la moda.
Por Juliana Villegas Fotos: Cortesía Colombiamoda
El equipo que tuvo en sus manos la preparación de la puesta en escena de la Universidad Pontificia Bolivariana para su participación en Colombiamoda 2020, tuvo que realizar cambios en la profundidad del contenido para adaptarse a la virtualidad y repensar la forma en que se realizaría la comunicación de las marcas seleccionadas para lograr el efecto esperado. No obstante, el escenario virtual elegido por cada uno de los seis participantes se veía ficticio y hacía deslucir las prendas.
Las seis marcas que pasaron la curaduría de un grupo de docentes de la institución para esta presentación virtual son Prisco, de Mayra Prisco; Dado, de Daniel Areiza y David Ortiz; Muaré, de Mariana Buriticá; Errantes, de Diana Yicell Álvarez; Manglar, de Natalia Andrea Ruíz, y Julias, de Diana Marcela Agudelo.
Las propuestas
Los estudiantes utilizaron para sus colecciones procesos naturales, teñidos a mano y bases que minimizan el uso de materiales sintéticos. Este es el caso de Manglar, una marca que le apunta a los detalles artesanales como el nuevo lujo y que es consciente de que el buen diseño mejora con el tiempo. La marca resalta la biodiversidad para generar un vínculo emocional con el entorno y lo logra a través de colores crudos, tejidos entrelazados, mangas abultadas y boleros en fibras naturales en prendas que le sirven de base vestidos de baño y bodies con estampados de motivos naturales.
Julias, por su parte, elogia la lentitud, invita a valorar el tiempo y los pequeños regalos de la vida. Es equilibrio y reivindica el derecho a establecer los propios tiempos para liberarse de lo innecesario. Sus diseños de siluetas holgadas y con caída, estampadas con tintes naturales, están pensaos para una mujer que prioriza la tranquilidad y tiene una mirada sensible de su entorno.
Prisco, en cambio, habla a través del arte urbano. Sus prendas coloridas poetizan las realidades hostiles y desdibujan los límites de género y del cuerpo con siluetas oversize que mezclan el universo streetwear con el sportwear.
Dado le apuesta al uso de prenda sobre prenda con piezas de formas más bien experimentales. Se destacan los detalles de recogidos y arruches que les dieron textura a las prendas.
Muaré exterioriza la lencería para llegar a esa mujer determinada y segura de sí misma que prefiere una estética entre lujosa y fetichista, con piezas que mezclan encaje, tul y volantes semi rígidos.
Los errantes son quienes van de un lugar a otro sin emplazamiento fijo. Visualizan su llegada, pero sus rumbos son tejidos por el azar, la creatividad y sus pasiones. La marca Errantes se dirige, a través de sus estampados tribales, deshilachados y construcciones a partir de combinaciones de retazos, a esos que encuentran magia en el transitar el mundo.
La “nueva normalidad”
Según Rafael Bernal, docente de la Facultad de Diseño de Vestuario, las marcas participantes en la puesta en escena de la UPB en la Semana Digital de la Moda, representan, desde sus lenguajes, una conexión con la accesorización acorde a los momentos actuales. “Piezas complemento que acompañan los diferentes atuendos, la funcionalidad de las prendas para diferentes ocasiones de uso y la evolución del casual con toques leisurewear hace que las prendas evolucionen y ofrezcan la versatilidad de esta nueva normalidad”.